Un calor insoportable en la sala de cine, además de no respetar ninguna medida de seguridad, con butacas pegadas a la pared y sin pasillos de salida. Muy mal organizado el local del cine de la calle c Gehiago irakurri garreras de Madrid.

Un documental que te remueve en el asiento y te hace pasar de la tristeza, al enfado y después a la incomprensión en cuestión de segundos. Cuando acabó, la sala estaba en silencio, sin palabras.

La sala olía mal porque está mal ventilada.

Debería ser vista por toda la población española, dentro de un contexto de memoria histórica en el que se digan las cosas tal y como ocurrieron, sin tabúes ni medias verdades. Recordar y aprender de l Gehiago irakurri historia es nuestra obligación para con las generaciones futuras. La ley de amnistía o "ley del olvido" de la transición española pudo haber sido un mal necesario para volver a la democracia, ya que eran los mismos políticos franquistas los que llevaron a cabo la transición y los que se beneficiaban directamente de esta ley por sus crímenes de lesa humanidad, además de los presos políticos opositores al franquismo. Pero tras más de 40 años de democracia, cuando ya el poder volvió al pueblo hace tanto tiempo, mantener esta ley es una burla a las víctimas. Es irresponsable e injusto dejar que los crímenes de lesa humanidad queden impunes, abandonar a los muertos en las fosas comunes, perdonar a los que nunca han pedido perdón y enseñar que el fin justifica los medios. Este documental trata sobre la lucha de las víctimas del franquismo por la justicia y el reconocimiento de la verdad que se oculta en las cunetas, en las fosas comunes, en las antiguas cárceles políticas y salas de tortura, en los hospitales donde se robaban bebés. Ellos no pueden olvidar. Y nadie debería hacerlo.

Un sitio muy comodo y acogedor para una pelicula muy impactante y profunda